Carta
abierta a Alejandra Barrales.
Señora
Barrales: ¿Usted también?
Tal
y como el señor Slim lo hace, ahora usted se mete con nuestra
tierra, nuestra historia y nuestras vidas.
¿Por
qué? ¿Qué mal le hemos hecho?
El
18 de abril, al participar en el debate para gobernar la Ciudad de
México, la escuchamos decir que está a favor de la construcción
del Nuevo Aeropuerto. Lo que significa que está a favor de que nos
despojen nuestras tierras y de que nuestros pueblos entren en un
irreversible proceso de extinción. Lo mismo nos desea el señor
Carlos Slim. Pero entre él y usted hay una enorme diferencia. Verá
usted.
El
señor Slim es congruente con su clase. Representa al poder del
dinero, al gran capital nacional y extranjero. En consecuencia con
ello, sale en defensa de la construcción del Nuevo Aeropuerto; o
sea, en defensa de sus negocios. Slim es un enemigo sincero. Su
comportamiento de clase, estrictamente en ese sentido, es congruente.
En
cambio usted señora Barrales, está lejos, muy lejos de eso. Mire
usted las ironías de la vida.
Cuando
Fox, en el año 2000, nos quiso arrebatar las tierras con su decreto,
usted ya trabajaba justamente en el actual aeropuerto. Era sobrecargo
de aviación, un puesto que antes simplemente era conocido como
aeromoza. O sea, usted era una trabajadora del aire, y nosotros del
campo.
Y
cuando Mexicana de Aviación, la empresa para la que trabajaba, se
declaró en quiebra, despidiendo a 5000 almas, usted era la
Secretaria General de Sobrecargos de Aviación. Y luchó, y protestó
y se manifestó contra el capital y a favor del trabajo. O sea, antes
fue congruente con la clase social de la que emanó. Pero ahora, ¿Qué
le pasó?
Incluso,
su conducta original de clase, la llevó a ser invitada e incluida en
esfuerzos de coordinación sindical a nivel nacional, como la
Federación de Empresas de Bienes y Servicios (FESEBES) y la Unión
Nacional de Trabajadores (UNT). Ahí ocupó cargos. Ahí representó
a más que las Sobrecargos. Pero ahora, ¿Qué le pasó?
Con
sus declaraciones a favor de Slim, favor de los gobiernos derechistas
y represores, todo parece indicar que usted retomó el vuelo, pero
hacia otra clase, la clase que antes combatió. ¿Por qué señora
Barrales? ¿Qué la hizo cambiar? ¿Su departamento en Miami? ¿Su
casa en Las Lomas de Chapultepec? ¿Su ambición por seguir ganando
carrera en el gran negocio que hay detrás de la impunidad?
Slim
es congruente; pero usted, no.
Slim
es sincero con su clase; pero usted es una desclasada social. El
dinero le corrompió el alma.
Usted
es una decepción para la clase obrera del aire y de la tierra.
Esas
tierras nos pertenecen. Por varias generaciones han sido labradas y
defendidas con ríos de sudor, lágrimas y sangre. Son nuestra vida,
y la vida señora Barrales, nosotros, a diferencia de usted, no es
moneda de cambio con los que nos imponen muerte.
Quédese
usted al lado de Slim y las chequeras de los despojadores de México.
Nosotros, por nuestra parte, no daremos un paso atrás en defensa de
la tierra, por el contrario, llamamos a todas y todos a resistir, a
luchar ahora y después del 1 de julio.
¡Porque
amamos la vida podemos pelear hasta la muerte!
¡ZAPATA
VIVE, LA LUCHA SIGUE!
Atentamente:
Frente
de Pueblos en Defensa de la Tierra, Atenco.
Publicado
por Lucha de clases-México
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