El Gran Sol Rojo del Amanecer

lunes, 30 de abril de 2012

DECLARACIÓN CONJUNTA POR PRIMERO DE MAYO



Proletarios de todos los países, uníos!
¡Viva el Primero de Mayo internacionalista y revolucionario!

“La conquista del poder político ha venido a ser, por lo tanto, el gran deber de la clase obrera”
Karl Marx
Manifiesto inaugural de la
Asociación Internacional de los Trabajadores
1864

El Primero de Mayo es el día del proletariado mundial, este día es un símbolo de todas las luchas históricas de los trabajadores por la conquista de aumento de salarios, reducción de la jornada de trabajo y mejores condiciones laborales, y tiene como inspiración histórica el heroísmo de los trabajadores de Chicago que entregaron sus vidas enfrentando a los capitalistas y a su reaccionario aparato estatal. Sin embargo quedarse en este punto sería quedarse en el punto de vista del revisionismo y el reformismo. Los comunistas debemos ir más allá, para nosotros la celebración del día del proletariado nos exige reafirmar su papel de vanguardia revolucionaria en la transformación de la vieja sociedad y la creación de la sociedad socialista, es decir colocarlo en su papel político e histórico de sujeto revolucionario mundial.

En estos tiempos el papel de la clase obrera y de su vanguardia organizada es cuestionado desde diversos frentes, se niega su papel de dirección revolucionaria y comunista contraponiéndolo con otros sujetos sociales. El revisionismo y la academia burguesa atacan la dictadura del proletariado, la economía planificada, la necesidad de Partido Comunista y la violencia revolucionaria como método para transformar la sociedad. Junto al imperialismo, han combatido tenazmente los evidentes avances que se realizaron durante la construcción del socialismo en Rusia y en China. A pesar de todo este ataque concentrado no se ha podido superar los logros que el proletariado consiguió en su primera fase de construcción de Nueva Democracia y Socialismo. Es tarea de los comunistas tomar como punto de partida estos hitos históricos, sacando las lecciones positivas y negativas, y avanzar a mayores niveles en la transformación revolucionaria de la sociedad.

En las condiciones actuales de la crisis del imperialismo, de su profundización con sucesivos capítulos dentro de su alargamiento, se agudizan todas las contradicciones fundamentales de la época, con más guerras de rapiña, crecientes choques diplomáticos y políticos entre superpotencias y potencias, atizando a las masas explotadas y los pueblos oprimidos a la lucha y empujando al proletariado de los países capitalistas a combates por sus derechos pisoteados, provocando crecientes desórdenes en todo el mundo y apuntando al peligro de una nueva guerra mundial.

Estas contradicciones fundamentales son: contradicciones intermonopólicas e interimperialistas que se agudizan por la lucha de una nueva repartición del botín (y nuevas esferas de influencia) en los países de Asia, África y América Latina; contradicciones entre el proletariado y la burguesía que empuja al primero a la lucha por la defensa de sus derechos robados en los países imperialistas y en los países oprimidos como una de sus contradicciones fundamentales y, la contradicción entre el imperialismo y las naciones oprimidas que sigue siendo la contradicción principal en el mundo se expresa por la permanente agresión que el imperialismo hace sobre los países atrasados a través de sus intervenciones militares (Iraq, Afganistán, entre otros) y la subordinación y saqueo de las economías de sus semicolonias.

Las luchas populares contra la explotación del sistema imperialista mundial se manifiestan en las rebeliones de jóvenes y trabajadores en el corazón de las potencias imperialistas, así también en el resto de países del planeta.

La Guerra Popular en la India es la avanzada del proletariado mundial porque cuenta con una dirección comunista, y también las Guerras Populares en Filipinas, Perú y Turquía que se desenvuelven en medio de grandes complejidades. Las guerras de resistencia contra la intervención imperialista en Iraq y Afganistán, a pesar de abrir un enfrentamiento directo a éste poder, no tienen una dirección revolucionaria proletaria y por eso no pueden avanzar en una auténtica liberación. De igual manera la intervención del imperialismo en los países africanos y la acción de los lacayos locales ha levantado la reacción ejemplar y heroica de los pueblos, que sin embargo, ante la ausencia de una dirección revolucionaria no han podido romper el marco de la semifeudalidad y semicolonialidad en la que se desenvuelven sus Estados.

En América Latina los pueblos vienen acentuando su lucha, los conflictos sociales se multiplican en cantidad y en calidad, es decir, el enfrentamiento se hace más enconado y con mayor nivel de conciencia clasista. La careta de izquierdista, antiimperialista o progresista de algunos gobiernos latinoamericanos (Venezuela, Ecuador, Bolivia, Nicaragua, Argentina, Brasil) que buscaba embaucar a las masas se ha caído, las prácticas corporativas y socialfascistas son las formas para la persecución política, el encarcelamiento y el asesinato contra los sectores contestatarios del movimiento popular que, día que pasa, recupera su independencia, desenmascara y combate la práctica servil de estos gobiernos ante el imperialismo. La política económica ha favorecido fundamentalmente al sector financiero mientras que la situación de la gran mayoría de la población sigue siendo de miseria, pobreza y explotación.

Los procesos de reforma aplicados en estos países han sido en realidad procesos de reestructuración de los Estados que se encuentran en una crisis profunda. El capitalismo burocrático necesitaba un nuevo programa y los llamados gobiernos progresistas (que representan a una facción de la clase dominante) han dado la receta para salvar temporalmente al viejo Estado de su crisis estructural aceitando la vieja maquinaria que hoy continúa explotando y reprimiendo a los sectores populares. Quienes tuvieron expectativas con estos gobiernos han recibido nuevamente una amarga lección de traición y desengaño.

Aparte de estas luchas hay un intenso movimiento de carácter reivindicativo de las masas en todo el planeta, pero carente de dirección auténticamente revolucionaria. Sin duda la mayor parte de las luchas populares tienen un carácter espontáneo y se desenvuelven dentro de los límites del sistema y muchas veces son utilizadas por una u otra fracción de las clases dominantes a través del revisionismo y el oportunismo. Esto revela que los pueblos claman una transformación radical de la sociedad, pero también plantea la imperiosa necesidad de los comunistas de redoblar esfuerzos para ponernos a la cabeza de estas luchas y multiplicar las energías en la construcción de la vanguardia organizada que emprenda la lucha para la toma del poder por el proletariado y el pueblo.

Defender el Maoísmo y combatir al revisionismo y todo oportunismo
para unir al Movimiento Comunista Internacional

El Movimiento Comunista Internacional (MCI) tiene en frente una coyuntura compleja y brillante. La traición de la dirección del movimiento revolucionario nepalés y la posterior crisis del Movimiento Revolucionario Internacionalista generó cierta dispersión en el MCI. Esto consintió un viraje hacia posiciones revisionistas identificadas con la traición de la dirección del partido nepalés: buscando promover y justificar acuerdos de paz con las clases dominantes, defender procesos reformistas con demagogia antiimperialista (como el caso de América Latina) o retomar el viejo gradualismo en los procesos políticos negando la necesidad de revolución violenta para la transformación social.

Sin embargo, se ha abierto un periodo de confrontación ideológica y política, muy importante y trascendental, que tiene la perspectiva de alcanzar la unidad del MCI combatiendo abiertamente a los revisionistas y desenmascarando los posicionamientos centristas y conciliadores.

La unidad ideológica del MCI es un requisito indispensable de los comunistas para encarar con éxito la ola revolucionaria que viene, por ello es necesario llevar la lucha ideológica hasta el fin, esto es, desenmascarar las posiciones que buscan conciliar los principios revolucionarios con el revisionismo, que con soterrado oportunismo hacen concesiones a supuestas posiciones de “izquierda” que se encuentran en el marco de la discusión revisionista. Es necesario contribuir en la lucha abierta contra los defensores de estas posiciones centristas dentro del MCI y persuadir en la lucha ideológica a quienes están dispuestos a avanzar en una ruptura franca con el revisionismo para alcanzar una unidad de principios.

Por otro lado, en el seno del MCI se desarrolla una perspectiva brillante plasmada en la Guerra Popular en la India como la mayor avanzada de la lucha de clases del proletariado mundial, dirigida por el Partido Comunista de la India (Maoísta) [PCI (M)] y construyendo el Nuevo Poder con las masas más pobres del campo y la ciudad, el PCI (M) ha asumido la responsabilidad de acabar con el viejo Estado Indio y construir la Nueva Democracia en marcha al socialismo. Para los comunistas de hoy, los maoístas, esta lucha es trascendental y debemos apoyarla sin reservas sacando lecciones y superando los errores del pasado.

Nuestra tarea es construir el camino de la Nueva Democracia (destruyendo las relaciones feudales o semifeudales) en marcha ininterrumpida al socialismo en los países dominados por el imperialismo y directamente al socialismo en los países capitalistas desarrollados e imperialistas, hasta nuestra meta final, la sociedad comunista. Ello implica construir las herramientas de la revolución –el Partido Comunista de Nuevo Tipo, el Ejército Popular y el Frente Unido con las masas– que abran la senda de la lucha por el Poder político bajo una dirección comunista y revolucionaria, desencadenando la guerra revolucionaria que destruya los cimientos de la vieja sociedad y construya una nueva.

¡Viva el Primero de Mayo clasista, combativo y revolucionario!
¡Viva el marxismo-leninismo-maoísmo!
¡Viva la Nueva Ola de la Revolución Proletaria Mundial!
¡Muerte al imperialismo, a la reacción y al revisionismo!
¡Abajo la guerra imperialista y viva la Guerra Popular!
¡Salvo el poder, todo es ilusión!

1 de Mayo de 2012


Partido Comunista de Brasil – Fracción Roja
Partido Comunista de Ecuador – Sol Rojo
Frente Revolucionario del Pueblo (Marxista-leninista-maoísta) de Bolivia

Un vallekano en Rumania / Un vallekan în România: 1 mai muncitoresc (1 mayo obrero)

Un vallekano en Rumania / Un vallekan în România: 1 mai muncitoresc (1 mayo obrero): Dos decadas despues del golpe de estado de diciembre de 1989 la fiesta del 1 de mayo se reduce en Rumania a irse a la montaña o al mar a ...

VANGUARD, Nº 4, MAYO DE 2012

ÓRGANO DEL PARTIDO COMUNISTA MARXISTA-LENINISTA- AUSTRALIA


http://www.vanguard.net.au/2008/index.php 


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Mensaje Conjunto a los Obreros de Todos los Países


¡Al Combate por el Triunfo de la
Revolución Proletaria Mundial!


Como cada año, este Primero de Mayo los obreros de todos los países honran la memoria de los mártires de Chicago, estrechan sus lazos de solidaridad, pasan revista a sus filas y reafirman sus objetivos de abolir toda forma de explotación y de opresión sobre la tierra. Un día donde el ejército proletario mundial, toma las calles al frente de las masas populares, une sus voces en combate contra el imperialismo y la reacción, y en apoyo a la lucha revolucionaria de sus hermanos de todos los países y de los pueblos del mundo.
Y no puede ser de otra forma, por cuanto la crisis capitalista mundial continúa haciendo estragos por doquier, llevando los terribles sufrimientos del hambre y la miseria a las masas trabajadoras, dejando su estela de muerte, de destrucción de la naturaleza y arrasamiento de los pueblos, acrecentando el peligro de una nueva guerra mundial para la cual se preparan los imperialistas, poniendo en evidencia la decadencia de un sistema agonizante, violentamente opuesto al progreso de la sociedad.
La pretensión de los imperialistas y sus regímenes lacayos en los países oprimidos de salvarse de la ruina y de su inevitable destrucción, intensifica la explotación y la opresión sobre el proletariado y los pueblos, acrecienta la resistencia y la rebelión de los desposeídos. Las contradicciones antagónicas entre explotados y explotadores, entre oprimidos y opresores, exacerbadas al límite por la voracidad de la minoría parasitaria que vive del trabajo ajeno, impulsan las fuerzas de la sociedad, especialmente las del proletariado de todos los países, a la revolución: poderosas manifestaciones y huelgas en las mismas entrañas de los países imperialistas, innumerables levantamientos e incluso insurrecciones populares contra las consecuencias de la crisis en los países oprimidos, resistencia armada de los pueblos en Irak, Afganistán y Palestina agredidos por el imperialismo y sus mercenarios… acontecimientos que son signos innegables de la tormenta revolucionaria.
Sin embargo, no son suficientes las luchas y rebeliones espontáneas de los trabajadores, no basta tumbar tiranos o gobernantes, no basta mitigar los sufrimientos, no basta frenar la agresión imperialista; hay que decidirse a cambiar radicalmente la situación del mundo. Ello hace necesario transformar la lucha espontánea en lucha consciente, pasar de la rebelión a la revolución, llevando la lucha hasta el derrocamiento de todo el poder de los enemigos del pueblo, destruyendo con la Guerra Popular, con la violencia revolucionaria de las masas, el viejo Estado reaccionario de los explotadores, para instaurar sobre sus ruinas el nuevo Estado de los obreros y los campesinos, la Dictadura del Proletariado, hacia donde tienen la mira los pueblos de la India, Turquía, Perú y Filipinas, alzados en Guerras Populares dirigidas por los comunistas, marxistas leninistas maoístas.
El proletariado, la clase que no tiene nada que perder en la revolución más que sus cadenas y, por consiguiente, la clase más revolucionaria de esta época, cobra cada día más importancia en la lucha contra la explotación y la dominación imperialista. Y su responsabilidad de dirigir la lucha revolucionaria de las masas populares se encuentra respaldada en los esfuerzos de los marxistas leninistas maoístas que persisten en construir su Partido político independiente en cada país, como parte de una Internacional Comunista de nuevo tipo, instrumento imprescindible para el triunfo de la Revolución Proletaria Mundial, única salida a la catástrofe que el imperialismo ha causado a toda la sociedad.
Pero en contra de tal propósito se levanta, no sólo la persecución y el terrorismo estatal de los explotadores, sino además el oportunismo, la ideología y la política burguesa en el propio seno del movimiento obrero, que desvía al proletariado buscando perpetuar el capitalismo imperialista. Tal es el papel de las corrientes trotskistas y hoxhistas, de algunas que se dicen marxistas leninistas e incluso marxistas leninistas maoístas, cuyas teorías y prácticas, como en el caso del Partido Comunista Unificado de Nepal (Maoísta), condujeron a la traición de la revolución, a la claudicación ante el imperialismo y las clases dominantes lacayas, y al desarme de la Guerra Popular y el Ejército Popular de Liberación del heroico pueblo de Nepal, cuya experiencia de lucha será terreno abonado para el reencuentro con la línea correcta de un nuevo Partido construido sobre la derrota total del viejo partido y su línea revisionista. Un ataque secundado por el Partido Comunista Revolucionario, Estados Unidos que, bajo el nombre de la “nueva síntesis de Avakian”, pretende suplantar la teoría del socialismo científico, el Marxismo Leninismo Maoísmo, por las teorías burguesas de las reformas sociales. El ataque de esos partidos revisionistas, integrantes del Movimiento Revolucionario Internacionalista –MRI, y el silencio cómplice de su Comité dirigente, ocasionaron la debacle de este movimiento como centro embrionario del proletariado mundial.
Hoy, ante el irrefutable colapso del Movimiento Revolucionario Internacionalista, la posición centrista que legitimó el silencio cómplice, oculta el peligro principal que representa el revisionismo para la unidad del Movimiento Comunista Internacional, minimiza su traición al proletariado mundial y sus infamias contra el pueblo de Nepal, opaca la visión de los comunistas e impide a los obreros comprender con claridad el papel del revisionismo en las derrotas de su movimiento político, contribuyendo a alejarlos de los problemas políticos de su revolución. Ahora, sobre esa base de conciliación con los enemigos del proletariado, el centrismo propone revivir el Movimiento Revolucionario Internacionalista en lo que llaman “Conferencia Ampliada del MRI”, basada en desconocer su bancarrota y las causas revisionistas de la misma, con lo cual se agravaría aún más la confusión, dispersión e impotencia de los comunistas revolucionarios.
Pero contrariando el pesimismo y la desesperanza de los viejos y nuevos revisionistas, así como el eclecticismo de los centristas conciliadores, las contradicciones del imperialismo en su avanzado estado de agonía, desatan las fuerzas mundiales del trabajo contra el parasitismo imperialista, reclamando con urgencia la unidad internacional del proletariado. Unidad en la cual se empeñan ahora los proletarios revolucionarios demoliendo las falsas teorías revisionistas y las posiciones eclécticas del centrismo. Unidad que debe concretarse en una propuesta de Línea General del Movimiento Comunista Internacional, que trace un profundo deslinde entre el marxismo y el oportunismo, y sea la firme base de unidad para forjar la nueva Internacional que dirigirá las grandiosas batallas de la Revolución Proletaria Mundial contra el imperialismo y todos sus lacayos.
Las poderosas fuerzas revolucionarias desatadas por el imperialismo –capitalismo agonizante– exigen la dirección del proletariado y los comunistas. Por ello este Primero de Mayo, los marxistas leninistas maoístas llaman a los proletarios de todos los países al combate por el triunfo de la Revolución Proletaria Mundial, a marchar bajo las banderas del internacionalismo proletario y a unirse a sus gritos de batalla y lucha política por el Socialismo y el Comunismo.
¡Abajo la Explotación y la Dominación Imperialista!
¡Viva la Revolución Proletaria Mundial!
¡Vivan las Guerras Populares en la India, Perú, Turquía y Filipinas!
¡Contra el Revisionismo y el Centrismo: Viva el Marxismo Leninismo Maoísmo!
¡Por una Nueva Internacional Comunista Basada en el Marxismo Leninismo Maoísmo: Adelante!

Primero de Mayo de 2012


Centre Marxiste-Léniniste-Maoïste - Belgique
Parti Communiste Marxiste-Léniniste-Maoïste – France
Grupo Reconstrucción - PERUCRPM – Estado Español
Colectivo Odio de Clase – Estado Español
Comunist Party Marxist-Leninist-Maoíst (Bangladesh)
Partido Comunista (Marxista-Leninista) - Panamá
Unión Obrera Comunista (MLM) – Colombia
Marxistas-Leninistas-Maoístas Árabes



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domingo, 29 de abril de 2012

LENIN SOBRE EL PRIMERO DE MAYO


EL PRIMERO DE MAYO

V.I. Lenin


¡
Camaradas obreros! Se acerca el Primero de Mayo, día en que los obreros de todos los países conmemoran su despertar a una vida con conciencia de clase, su solidaridad en la lucha con­tra toda violencia y toda opresión del hombre por el hombre, en la lucha por liberar a millones de trabajadores del hambre, la miseria y la humillación. Dos mundos se alzan frente a frente, en esta grandiosa lucha: el mundo del capital y el del trabajo, el mundo de la explotación y la esclavitud, y el de la fraternidad y la libertad.
Por una parte, hay un puñado de ricos parásitos. En sus manos se concentran los talleres y las fábricas, las herramien­tas y las máquinas. Han convertido millones de desiatinas de tierra y montañas de dinero en su propiedad privada. Han hecho del gobierno y el ejército sus criados, fieles guardianes de la riqueza que han acumulado.

Por otra parte, hay millones de desheredados, obligados a su­plicar a los ricos el permiso de trabajar para ellos. Crean con su trabajo toda la riqueza, mientras ellos mismos tienen que luchar toda la vida por un pedazo de pan, mendigar el trabajo como una limosna, agotar sus fuerzas y arruinar su salud en trabajos insoportables, pasar hambre en las chozas de las aldeas y en los sótanos y buhardillas de las grandes ciudades.

Pues bien, estos millones de trabajadores desheredados han declarado la guerra a los ricos y explotadores. Los obreros de todos los países luchan por emancipar al trabajo de la esclavitud asalariada, de la miseria y la indigencia. Luchan por una orga­nización de la sociedad en la que las riquezas creadas por el trabajo común beneficien a todos los trabajadores, y no a un pu­ñado de ricos solamente. Quieren que las tierras, las fábricas, los talleres y las máquinas se conviertan en propiedad común de todos los que trabajan. Quieren que no haya ricos ni pobres, que los frutos del trabajo sean de los mismos trabajadores, que todas las conquistas de la inteligencia humana y todos los perfeccio­namientos en los métodos de trabajo sirvan para aliviar la vida del que trabaja, y no como instrumento de su opresión.

La grandiosa lucha del trabajo contra el capital ha costado ya inmensos sacrificios a los obreros de todos los países. Éstos han vertido ríos de sangre por defender su derecho a una vida mejor y a la verdadera libertad. Innumerables son las persecu­ciones que los gobiernos desencadenan contra los combatientes por la causa obrera. Pero la unidad de los obreros de todo el mundo crece y se fortalece, pese a todas las persecuciones. Los obreros se unen cada vez más estrechamente en sus partidos socialistas, el número de los que militan en sus filas suma ya millones, y avanzan paso a paso, inconteniblemente, hacia la victoria total sobre la clase de los capitalistas explotadores.

También el proletariado ruso ha despertado a una nueva vida. También él se ha incorporado a esta grandiosa lucha. Han pasado los tiempos en que nuestros obreros doblaban sumisa­mente el espinazo, sin ver una salida a su situación de sojuzga-miento ni un rayo de luz en su amarga vida. El socialismo les ha mostrado esa salida, y miles y miles de combatientes se agru­pan bajo la bandera roja, levantando los ojos hacia ella como hacia su estrella polar. Las huelgas han mostrado a los obreros la fuerza de la unidad, les han enseñado a oponer resistencia, han revelado qué amenaza puede representar para el capital los obreros organizados. Los trabajadores han comprobado cómo de su trabajo viven y se enriquecen los capitalistas y el gobierno. Se ha encendido en ellas el deseo de luchar unidos, la aspiración a la libertad y el socialismo.

Comprenden qué fuerza tan funesta y sombría es la autocracia zarista. Los obreros necesitan libertad para su lucha, y el gobierno zarista los ata de pies y manos. Nece­sitan libertad de reunión, libertad de asociación, libertad para publicar periódicos y libros, y el gobierno zarista aplasta con la cárcel, el látigo y las bayonetas todas las aspiraciones de libertad. El grito "¡Abajo la autocracia!" resuena a lo largo y ancho de Rusia. Se repite cada vez con mayor frecuencia en las calles y en multitudinarias asambleas de obreros. En el verano pasado decenas de miles de trabajadores en todo el sur de Rusia, se pusieron en pie para luchar por su vida mejor, por liberarse del despotismo policíaco. La burguesía y el gobierno se estremecieron ante el formidable ejército obrero, que de un solo golpe paralizó toda la industria de enormes ciudades. Decenas de combatientes por la causa obrera cayeron bajo las balas de las tropas zaristas, movi­lizadas contra el enemigo interno.

Pero no hay fuerza que pueda vencer a este enemigo interno, porque su trabajo es lo único que sostiene a las clases gobernantes y al gobierno. No hay en el mundo fuerza capaz de aplastar a millones de obreros, cada vez más concientes, unidos y organiza­dos. Cada derrota de los obreros incorpora a nuevos destacamen­tos de combatientes, despierta a masas cada vez más amplias a la nueva vida y las impulsa a prepararse para nuevas luchas.

Y Rusia vive ahora acontecimientos en los que este desper­tar de las masas obreras tendrá que cobrar inevitablemente un ritmo más rápido y mayores proporciones, en que debemos concentrar todos nuestros esfuerzos para unir las filas del proletaria­do y prepararlo para una lucha todavía más decisiva. La guerra hace que aun las capas más atrasadas del proletariado se intere­sen por los asuntos y los problemas políticos. Pone al descubierto con creciente claridad y profundidad toda la podredumbre del régimen autocrático, la absoluta criminalidad de la banda po­licíaca y palaciega que gobierna a Rusia. Nuestro pueblo se hunde en la miseria y muere de hambre en su país, y lo arras­tran a una guerra devastadora e insensata por la conquista de nuevas tierras extranjeras, pobladas por razas extrañas y situados a miles de verstas de distancia. Nuestro pueblo vive aplastado bajo la esclavitud política, y lo arrastran a la guerra para esclavizar a otros pueblos. Nuestro pueblo exige la trasformación del orden político interno, y se procura desviar su atención con el estampido de los cañones en el otro confín de la tierra. Pero el gobierno zarista ha ido demasiado lejos en su juego de azar, en su criminal despilfarro del patrimonio nacional y de las fuer­zas de la juventud, que perecen en las playas del Océano Pacífico. Toda guerra pone en tensión las fuerzas del pueblo, y la difícil guerra contra el culto y libre Japón exige de Rusia una gigantesca tensión de fuerzas. Y esto, en un momento en que el edificio del despotismo policíaco ha comenzado ya a vacilar bajo los golpes del proletariado que despierta. La guerra descubre los puntos débiles del gobierno, desgarra los rótulos mentirosos, revela toda, la podredumbre interior, hace que lo absurdo de la autocracia zarista resulte evidente para todos, pone de relieve ante todo el mundo la agonía de la vieja Rusia, de la Rusia cuyo pueblo carece de derechos y está sumido en la ignorancia y el temor, de la Rusia reducida por el gobierno policíaco al sojuzgamiento de la servidumbre.

La vieja Rusia agoniza. Una Rusia libre viene a ocupar su lugar. Las fuerzas oscuras que sostenían a la autocracia zarista, se hunden. Pero sólo el proletariado conciente y organizado podrá asestarles el golpe de muerte. Sólo el proletariado conciente y organizado podrá conquistar para el pueblo la verdadera liber­tad, no una libertad falsificada. Sólo el proletariado conciente y organizado podrá desbaratar todo intento de engañar al pue­blo, de coartar sus derechos, de convertirlo en mero instrumento en manos de la burguesía.
¡Camaradas obreros! ¡Preparémonos con redoblada energía para el combate decisivo que se acerca! ¡Que se estrechen las filas de los proletarios socialdemócratas! ¡Que su voz se propa­gue con amplitud cada vez mayor! ¡Que la agitación en torno de las reivindicaciones obreras se despliegue cada vez con mayor audacia! ¡Que la celebración del Primero de Mayo atraiga a nuestra causa miles de nuevos combatientes y engrosé nuestras fuerzas en las grandiosa lucha por la libertad de todo el pueblo, por la emancipación de todos los trabajadores del yugo del capital!

¡Viva la jornada de trabajo de ocho horas!
¡Viva la socialdemocracia revolucionaria internacional!
¡Abajo la criminal y bandidesca autocracia zarista
!

Escrito el 2 (15) de abril de 1904.        Se  publica  de  acuerdo  con
Corregido y publicado en abril             el manuscrito.

de 1904, en forma de manifiesto.


sábado, 28 de abril de 2012

Gaullismo, el neo-gaullismo y el fascismo


(Nota de Luminoso Futuro:¿Hacia dónde va Francia hoy? ¿Qué cocina la burguesía imperialista en y tras las elecciones últimas al pueblo francés? He aquí, de seguido, un importantísimo artículo que pone al desnudo las fuerzas que se mueven, abierta o soterradamente, contra la revolución socialista y el socialismo. La amenaza de la dictadura fascista, o mejor neofascista, teniendo la misma base económica que aquel germano-italiano, vela los dulces sueños del proletariado francés a que le han inducido por tantas décadas los revisionistas eurocomunistas y los socialimperialistas galos. De Sarkozy en adelante: la revolución socialista o la dictadura terrorista abiertade la burguesía).

 25 de abril 2012
Referencias políticas, pues en De Gaulle se multiplican ampliamente en la Francia de hoy. Esto es especialmente gaullismo, de hecho, un neo-gaullismo, que se desarrolla como una ideología política, como el pensamiento y coherente visión del mundo para servir al imperialismo francés - como el propio De Gaulle. 

Gaullismo es una forma original de la dictadura del capital financiero y los grupos de monopolio en Francia. Se trata de un régimen autoritario ultra-nacionalista - pero eso no es exactamente un fascista. Se desarrolló en 1950-1960 para satisfacer las necesidades de expansión de la burguesía imperialista mantener el orden y el territorio nacional francés.

Volver gaullismo en el centro del escenario hoy en día como una ideología y programa político de la burguesía imperialista. Sin embargo, se intensifica y se convierte en crisis generalizada del capitalismo, el neo-gaullismo más aparece como la ideología más claramente fascistas - Marine Le Pen es el más claro representante de este movimiento.




1 / ¿Qué es el gaullismo 

"Toda mi vida he tenido una cierta idea de Francia. El sentimiento que me inspira, así como la razón. Lo que es emocional en mí, naturalmente, se imagina Francia, como las historias de princesas o de Madonna en los frescos de las paredes, como condenados a un destino eminente y excepcional. instintivamente sentí que la Providencia había creado para completó con éxito o desgracias ejemplares. el caso de que la marca mediocre, sin embargo, , sus acciones, experimento la sensación de una anomalía absurda, debido a las faltas de los franceses, no al genio del país. Pero también, el lado positivo de mi mente me convence de que Francia es realmente a sí mismo en la primera fila: que sólo las grandes empresas son probablemente mayores que los fermentos de la dispersión que su gente de la puerta en sí, nuestro país como lo es, entre otros, como son, debe bajo pena de peligro de muerte, apuntar alto y mantenerse erguidos. En resumen, en mi opinión, Francia no puede ser Francia sin la grandeza. "
Charles de Gaulle, Memorias de la Guerra de 1954

En cuanto a las instituciones burguesas, el gaullismo coincide con el inicio de la Quinta República en Francia, entre 1958 y 1969. 

Esto está directamente después del golpe del 13 de mayo de 1958 en Argelia y los acontecimientos que siguieron inmediatamente a que De Gaulle fue llamado a la cabeza del imperialismo francés.

En concreto, la operación consistió en una maniobra de la burguesía imperialista para imponer las manos sobre el Estado. Ella ha desmentido el republicano de magma - social demócrata que estuvo en el poder bajo la presidencia de René Coty y era incapaz de garantizar el mantenimiento de la colonización francesa.

Debido a la presión impuesta por el golpe de Alger - que exigían las perspectivas de lucha contra la revolución democrática en Argelia, las fuerzas políticas a la cabeza del Estado burgués se vieron obligados a ceder el paso a la burguesía imperialista y su Representante De Gaulle.

En este sentido, Mendes France declaró: "Esto es porque el Parlamento ha establecido que no hubo golpe de estado! ". La burguesía imperialista más o menos directamente amenazado por un golpe militar en Francia y en todo caso, mantiene una presión política muy fuerte, en un contexto de cuestionamiento internacional de la dominación imperialista francés.

El presidente René Coty ha tenido que recurrir directamente al general De Gaulle, "el más ilustre de los franceses," para que lo sustituya, que amenaza con dimitir si se niegan.

Esta presión adicional a continuación, obligaron al parlamento dominado por la democracia radical de izquierda y sociales, para apoyar la candidatura de De Gaulle y evitar el desbordamiento - y los riesgos que podrían seguir revolucionario.

Porque, aunque el Partido Comunista siguió objetivamente a la burguesía y de sus miembros habían votado a adoptar poderes especiales en Argelia para el gobierno de Guy Mollet en 1956, la presión democrática es aún muy fuerte en Francia y la clase obrera era todavía en gran parte animada el espíritu de la resistencia antifascista. La burguesía no podía permitirse el lujo de desbordamiento.

Esto es algo de un golpe de Estado en el que la dulzura se produce en 1958, hábilmente orquestada por la burguesía imperialista, al menos desde 1954 y el comienzo de la insurrección argelina. Todo se hizo para que De Gaulle pareciese ser el único recurso. Del 19 de mayo de 1958, pocos días después del golpe de Estado del 13 de mayo en Argel, que él lo había dicho "dispuesto a asumir los poderes de la República", a la que se había preparado durante varios años.

El Partido Comunista Francés y los socialdemócratas han sido completamente en el viento por estas maniobras. De Gaulle fue así capaz de buscar apoyo entre las masas para hacer valer su autoridad y obtener la libertad plena en el ejercicio de su poder.

Por lo tanto, organiza directamente un referéndum sobre una nueva constitución, que en realidad es un plebiscito, las masas de decidir a favor o en contra de su ascenso al poder. El éxito del plebiscito fue completo la constitución fue aprobada por el 79,2% de los votos, lo que permitió a De Gaulle a establecer un régimen de poder personal.

El Partido Comunista, que se encontraba completamente aislado, sólo obligará a pedir un voto en contra de la constitución con algunos socialistas disidentes, explicará algunos años más tarde en 1961 que:

"Gaullismo, es tanto una ideología, una constitución, un hombre. Estos tres elementos son inseparables, son un todo. Sin embargo, este último juega un papel esencial, ya que no hay gaullismo sin De Gaulle. "

En julio de 1959, fue citado en el diario Le Monde, el órgano de la socialdemocracia en su plannist:

"En el Elíseo, que decide, en el gobierno que ofrece y administra, en la administración que gobierna, entre los" barones menores "que guía y veneno, y finalmente al Parlamento dominado por el partido mayoritario, que todo ha terminado ahora el gaullismo triunfante. "

Características del gaullismo, es pretender estar por encima de las clases sociales y las contradicciones de la sociedad capitalista - por el gaullismo definición pretendía ser ni de izquierda ni de derecha, pero por encima de las disputas entre los partidos políticos. Afirma que encarnan una "tercera vía" y la intención de organizar una asociación entre capital y trabajo.

Las reclamaciones sobre el régimen gaullista encarnar el organismo nacional. De acuerdo con De Gaulle, necesitamos una cabeza fuerte de Estado que encarna plenamente la nación. 

Esta es la razón por la Constitución establece un papel para el presidente, que debe ser una especie de monarca republicano. En efecto, el artículo 16 de la Constitución, el Presidente puede asumir los poderes temporales de emergencia por 6 meses, si considera situtation dramático. Se ha podido establecer la elección del presidente por voto directo en 1962 (la estrategia que le permita consolidar su poder mediante la aprobación de las masas), pero lo que cuenta en todo caso, para él es que Parlamento se presentó y secundaria para el ejecutivo que supervisa todas las instituciones burguesas.

La Constitución de 1958 el establecimiento de la Quinta República ha hecho posible establecer un marco para asegurar la dominación de la burguesía imperialista, es decir, capital financiero y los grupos monopólicos sobre las instituciones del Estado.

De Gaulle es el arma de esta política, por sí sola durante 10 años encarnó la política del imperialismo francés, incluyendo la organización de la Francia pre-cuadrado en África después de la descolonización de una fachada. De que pudiera poner en práctica su programa imperial "El objetivo de alto y estar de pie", como le había explicado en sus memorias de guerra en 1954.

Pero De Gaulle es también un solo representante, un peón que se puede saltar en abril de 1969 - menos de un año después de haber cumplido la última vez en mayo de 1968. Por lo tanto, el gaullismo dará paso a una forma más consensual del imperialismo francés, teniendo en cuenta los intereses de la burguesía tradicional. Este es el caso del Pompidou, y aún más con Valéry Giscard d'Estaing, François Mitterrand, sino también después.

  
2 / gaullismo y el fascismo


¿Por qué el gaullismo no es el fascismo es esencialmente una cosa: el gaullismo es republicano y que constantemente plantea "la República" y no es una dictadura abierta de los más reaccionarios, más chovinistas , la mayor parte del capital financiero imperialista.

"El fascismo en el poder es, como acertadamente caracterizado a la decimotercera sesión plenaria del Comité Ejecutivo de la Internacional Comunista, la dictadura abiertamente terrorista del capital financiero más reaccionarios, chovinistas y más imperialistas más.

La variedad más reaccionaria del fascismo, el fascismo de tipo alemán, que descaradamente llamó nacionalsocialismo sin tener nada en común con el socialismo alemán. 

El fascismo alemán no es sólo un nacionalismo burgués, es un chovinismo bestia l. Se trata de un sistema de gobierno del bandidaje político, un sistema de provocación y la tortura hacia la clase obrera y de los elementos revolucionarios del campesinado, la pequeña burguesía y los intelectuales. 

Es la barbarie medieval y el salvajismo. 

Se trata de una agresión salvaje contra otros pueblos y otros países . "
Georgi Dimitrov, el fascismo y la clase obrera.

De hecho, el gaullismo en el poder no consiste en la barbarie medieval y el salvajismo. No es una dictadura terrorista abierta. Pero hasta ahora, a ver qué es exactamente la naturaleza de la clase del fascismo y cuáles son sus características.

Continuar con Dimitrov, quien se refiere en esta área para los comunistas con nosotros:

"El fascismo alemán parece ser la fuerza de choque de la revolución internacional de los convictos , como el principal instigador de la guerra imperialista e, como el instigador de la cruzada contra la Unión Soviética , el gran país de los trabajadores del mundo.

El fascismo no es una forma de poder estatal que, supuestamente, "se coloca por encima de las dos clases, el proletariado y la burguesía", como afirma, por ejemplo Bauer, Otto. 

No se trata de "la pequeña burguesía en  revuelta que se ha apoderado de la máquina del Estado", como dice el Brailsford Socialista inglés. 

No. 

El fascismo no es un poder por encima de las clases , ni el poder de la pequeña burguesía o el proletariado rebajó los elementos del capital financiero. 

El fascismo es el poder de las finanzas misma capital. 

Es la organización de la represión terrorista contra la clase obrera y el partido revolucionario de los campesinos y los intelectuales. 

El fascismo en la política exterior, es elchovinismo en su forma más cruda, el cultivo de un odio bestial contra otros pueblos.

Cabe destacar con particular vigor el verdadero carácter del fascismo, porque la máscara de la demagogia social del fascismo permitió que el plomo después de que, en una serie de países, las masas de la pequeña burguesía sesgada por la crisis, e incluso partes de las capas más atrasadas del proletariado, que no se siga el fascismo si hubiesen comprendido su verdadero carácter de clase, su verdadera naturaleza.

El desarrollo del fascismo y la dictadura fascista de sí mismo, se encuentran en diferentes países en sus diversas formas, de acuerdo con los criterios históricos, sociales y económicas, la situación específica nacional e internacional del país. 

En algunos países, sobre todo donde el fascismo no tiene una base amplia entre las masas y donde la lucha de los diferentes grupos en el campo de la propia burguesía fascista, es lo suficientemente fuerte, el fascismo e no se resuelve en el primer intento para liquidar el Parlamento y deja a los demás partidos burgueses, así como la democracia social, una cierta ley. 

En otros países, donde la burguesía dominante entiende más cercano estallido de la revolución, el fascismo establece su monopolio político o derecho ilimitado de la primera vez, o mediante el fortalecimiento de un creciente terror y la represión contra todos partidos y grupos. 

Este hecho no excluye la parte del fascismo, cuando un particular, el empeoramiento de su situación, los intentos de ampliar su base y, sin cambiar la esencia de la clase, combinada con la dictadura terrorista abierta manipulación el parlamentarismo gruesa.

La llegada del fascismo al poder, no se trata de la sustitución de un gobierno ordinario burguesa a otro, pero la sustitución de una forma estatal de dominación de clase de la burguesía - la democracia burguesa - de otra forma de esta regla, la dictadura declarada terrorista. 

Haciendo caso omiso de esta distinción sería un grave error, lo que impediría el proletariado revolucionario para movilizar a las masas trabajadoras de la ciudad más extensa y el país para la lucha contra la amenaza de la toma del poder por los fascistas, y utilizar las contradicciones en el campo de la propia burguesía. 

Pero es un error no menos grave y menos peligrosa a subestimar la importancia, para el establecimiento de una dictadura fascista, las medidas reaccionarias de la burguesía que es peor hoy en día en los países de la democracia burguesa, y aplastar las libertades democráticas de los trabajadores, cortar las esquinas y falsificar los derechos del Parlamento, acentuar la represión contra el movimiento revolucionario.

Camaradas, no podemos hacer que la llegada al poder del fascismo y la idea simplista de que un comité unido de cualquier capital financiero se decide establecer una fecha para la dictadura fascista. 

En realidad, el fascismo por lo general llega al poder en una lucha mutua, a veces aguda, con los viejos partidos burgueses o una porción específica de ellos, en una batalla que se libra, incluso en el campo fascista y que a veces a las colisiones armadas, como hemos visto en Alemania, Austria y otros países. 

Todo esto, sin embargo, sin debilitar la importancia del hecho de que antes del establecimiento de una dictadura fascista, los gobiernos burgueses por lo general pasan por una serie de medidas preparatorias y tomar una serie de medidas reaccionarias que contribuyen directamente a la llegada del fascismo. 

Resumamos: el fascismo en el poder, por lo tanto se caracteriza por:

- Un fuerte sentimiento anti-comunismo;
- Apoyo de la guerra imperialista;
- El poder del capital financiero en sí;
- A la represión terrorista contra la clase obrera, campesinos e intelectuales;
- Chauvinismo ordinario;
- Un odio bestial contra los demás pueblos;
- Una forma de demagogia social;
- Diferentes formas nacionales y sostiene que no es así necesariamente en forma directa el parlamento y la democracia social;
- Falsificación bruto de gobierno parlamentario;
- La sustitución de la democracia burguesa por la dictadura declarada terrorista.

Gaullismo es también un fuerte sentimiento anti-comunismo. Es incluso uno de sus principales características.Si bien, pero sobre todo porque, de hecho, De Gaulle fue capaz de establecer alianzas estratégicas con el imperialismo ruso social-imperialismo-en particular contra el imperialismo EE.UU..

Gaullismo es una forma particular de la guerra que llevó el imperialismo francés en los pueblos del mundo. Él se ha concentrado en el plano internacional, en la continuación de la guerra imperialista en una menos brutal después de que Francia había perdido "Indochina", y ella comenzó a ser cuestionada en África - en particular en Argelia. 

Como tal, el gaullismo no es chovinismo grueso, patrioterismo, sino más bien un "refinado", "republicano", que encapsula un civilizador pintó su odio bestial contra otros pueblos. Dicho esto, De Gaulle no siempre oculta su racismo, entre otras citas de los más conocidos: 

"Los árabes, no es nada. Nunca vimos a los árabes la construcción de carreteras, presas, fábricas. Después de todo, tal vez ellos no necesitan carreteras, presas, fábricas... " 

"¿África? Es muy sencillo, voy a explicar: es negro y el rastreo".

Sin embargo, el gaullismo es una forma modernizada de la agresión imperialista sutil y desenfrenada contra otros pueblos y otros países. Esa es la falsa descolonización ha significado organizada por De Gaulle en África.

Pero, sobre todo, el gaullismo es bueno, como el fascismo, la dictadura del capital financiero, dando lugar a capitalismo monopolista de Estado, el alto grado de desarrollo de los monopolios imperialistas, como veremos en la siguiente sección.

Gaullismo es una forma original de la dictadura del capital financiero, un régimen nacionalista y autoritario, pero no es un fascista. 

Pero eso no es democracia burguesa. Esto es evidente al mirar en la presentación de la Quinta República por el clásico pensador liberal burgué como Raymond Aron. Él explicó en 1959 que el presidente es

"Comparable a un rey de las monarquías constitucionales de hace un siglo, o el Príncipe-Presidente de una República bonapartista. Elegido por siete años, que no rinde cuentas a nadie, excepto a la historia, a menos que sea traído a la Corte Superior por de traición a la patria. Se elige al primer ministro, que sólo se puede disolver la Asamblea Nacional, podrá someter a referéndum las leyes aprobadas por el Parlamento, que cuenta con personal prerrogativa de gracia, se negocia y ratifica los tratados internacionales y es, al parecer, titulado a la conclusión de acuerdos militares, que no requieren la ratificación parlamentaria. En circunstancias excepcionales [artículo 16 de la Constitución], asume todos los poderes y se constituye por su propia decisión, el dictador en el sentido romano. "

Si gaullismo es una falsificación más o menos crudo del parlamentarismo burgués, que es también característica de que él se pone la máscara de la demagogia social.

Al igual que los fascistas, De Gaulle decía ser ni derecha ni izquierda, y pretende gobernar sobre las clases y la clase laúd, para encarnar la justicia social.

Esta similitud con la prosa fascista, De Gaulle tiene sus orígenes políticos.

Originalmente Maurassian grupo fascista y cerca de los realistas, antisemita y hostil a lo que el parlamentario de Acción Francesa - Charles Maurras, el pensador francés de Acción, tuvo gran influencia en la juventud intelectual burgués.

No dude en consultar de manera positiva a la Italia de Mussolini, De Gaulle, finalmente se volvió contra el régimen de Vichy, porque defendía la autonomía absoluta del imperialismo francés y no podía aceptar el sometimiento al imperialismo alemán.

La resistencia de De Gaulle no era anti-nazi, o incluso fascistas, nacionalistas, pero teniendo en cuenta la resistencia como una lucha de liberación nacional por la burguesía.

Pero sólo por la peculiaridad de la historia que es el hecho de que gran parte de los movimientos fascistas franceses han pasado a través de la colaboración, en realidad someter a otro imperialismo, que De Gaulle tiene un aura antifascista. Pero ninguno de sus pensamientos o la propia política original tiene que hacer ver con el fascismo, por el contrario.

Gaullismo tiene su origen en el hecho de que el fascismo francés de imponer su posición en relación a la presión democrática en la década de 1930, sobre todo después de que el Frente Popular en 1936. Se trata de una adaptación a lo social y lo político Francia después de la guerra por la burguesía imperialista para imponer la dominación del capital financiero. 

En 1947, De Gaulle basa, por tanto, el FPR, el encuentro de los franceses, para promover, el germen, su constitución (1958). El parlamentarismo ferozmente hostiles al comunismo y de la burguesía, ultra conservador, el partido aboga por una cierta indulgencia hacia Pétain se reagruparon las personas que colaboraron con los nazis. 

René Remond, el historiador, al referirse a la burguesía francesa, miembro de la Academia Francesa que murió en 2007, el FPR, dijo al respecto en la historia del gaullismo el momento en que sale menos "de lo que Francia se acostumbra a describir como el fascismo. "

El FPR de Gaulle tenía en sus filas, entre otras cosas, Edmond Barrachin fue en 1930 el Director del Comité Central del Partido Social Francés - el más grande de extrema derecha en el momento, con muchas organizaciones de masas. El Partido Social francesa se formó tras la disolución de la Cruz de Fuego, una liga nacionalista que participaron en los levantamientos fascistas de 1934.

El proyecto a corto plazo de RPF fracasó en la década de 1950. Pero esto es una continuación de la misma era que orquestó la toma del poder por De Gaulle en 1958 y la introducción de su nueva constitución. Este no es un accidente histórico que se produjo a causa de los "eventos" en Argelia. Esta es una maniobra que, como veremos, ha seguido precisamente los intereses de la financiera francesa.

Si es así que ganó el gaullismo en Francia y no de una forma particular del fascismo, que es por el contexto de alta presión y anti-democrática en los años 1950/1960. 

Gaullismo es una forma de profundamente anti-democrática de república burguesa que ofrece la posibilidad de que el rápido establecimiento de un régimen de autortitaire. Si no es el fascismo, la ideología gaullista tiene casi todas las características del fascismo. 

Prueba de ello es sin duda la visita de De Gaulle se dirigió inmediatamente a Franco después de haber sido removido del poder en 1969 - dijo que a pesar de no haberse reunido con él antes debido a circunstancias internacionales. 

Publicado por Voie Láctee, blog del PCMLF

Datos personales

periodista obrero. Comunista (marxista-leninista). Antiimperialista, anticapitalista y antimilitarista.