(Nota de Luminoso Futuro: El sociólogo y analista
internacional Enrique Muñoz Gamarra, ya conocido por nuestros lectores, entre
otros materiales de análisis teórico girantes a la actual situación económica,
política y militar en el mundo capitalista de nuestros días, me ha brindado la
ocasión de tomar conocimiento de un artículo económico especializado intitulado
“La gran transición hacia una nueva civilización” cuyo autor es Wim
Dierckxsens.
Parte
éste autor, premunido de una erudición económica libresca, señalando que al
centro de toda la situación económica actual, de crisis global de la economía y
de las relaciones de producción capitalista, se encuentra sirviéndole como base
la “contradicción fundamental en la racionalidad existente”. Confuso el
término, pues a la vez que apunta con el dedo a la contradicción económica fundamental
de la sociedad capitalista –entre la socialización del carácter de la
producción y la forma privada de la apropiación de los resultados de dicha
producción- fórmula que, no se sabe por qué, a renglón seguido invalida,
desviacionistamente, reduciéndola a una mera “incapacidad de desarrollar las fuerzas
productivas bajo las relaciones de producción existentes”. Expresando dicha
contradicción como crisis por la “racionalidad existente”. Es decir, con la
dirección y objetivos impreso a la economía nacional y mundial, con la actual política
económica dictaminada por el capitalismo
monopolista de Estado.
El
contenido real, pues, de tal contradicción resulta ser aquella existente entre
la “racionalidad” capitalista postmoderna, el neoliberalismo, entrabadora de
las fuerzas productivas. Viejo caballo de batalla de revisionistas modernos y
socialreformistas de izquierda, pero que a su vez se engarza con las ideas
económicas “anticapitalistas” de los sectores más avezados y ultrancistas de la
derecha corporatista y neofascistas.
¿Cuál
la salida a dicha “contradicción fundamental”, devenida en traba del desarrollo
capitalista internacionalizado, dicho globalizado o mundializado? ¿Puede el
capitalismo monopolista de Estado mundializado renovarse gracias a una nueva
racionalización de su economía? O ¿La crisis general del sistema capitalista mundial,
en su cuarta fase de desarrollo, es reducible a uno de sus aspectos componentes
secundarios como lo es envejecidas fuerzas productivas vrs racionalización
modernizadora de la dirección de la economía capitalista, con la adopción de
una política económica neokeyniseniana de “izquierda”? No señor Dierckxsens,
eso no es posible. No se puede confundir economía política y política
económica. Como tampoco, ni a nivel conceptual, se puede separar economía de política. “La
política es la expresión concentra de la economía”, nos han enseñado los
Clásicos del Marxismo-Leninismo-maoísmo.
Si el capitalismo monopolista, en
su fase final como capitalismo monopolista de Estado, pudiese lograr ese
milagro con frases hace tiempo lo hubiese adoptado. La crisis de la teoría
Keynes, adoptada internacionalmente desde los inicios de la II post guerra, se
ha iniciado por su incapacidad de resolver la crisis de acumulación del capital,
más aún ha contribuido a profundizarla e internacionalizarla. Esa misma teoría,
convertida en ideología económica dominante, es la que ha generado el subsiguiente
cambio a la política económica de libre comercio o neoliberalismo económico.
Nueva política económica –nueva en lo que cabe dentro del desarrollo histórico del
imperialismo económico- que hoy, a su
vez, ha profundizado la ya larga l crisis de la teoría económica capitalista
postmoderna.
Por lo que todo intento, sueño de
antimonopolistas burgueses y pequeñoburgueses, de buscar una “nueva
racionalidad capitalista” como base de una nueva civilización capitalista
adoptadora de una política económica basada en “términos de valor y más en
términos de valor de uso”. Con lo que se “supera” el fin real del capitalismo,
la plusvalía y la ganancia, desvaneciéndolo
con términos alambicados y hueros. Y cuya única mira, realmente, es darle un
esquinazo a la revolución proletaria y apartar a la clase obrera de la búsqueda
del socialismo auténtico, proletario, como realidad conquistable y construible;
como reemplazo a la agotada y en quiebra economía capitalista y de todo su
sistema de poder político gubernamental y estatal burgués.
Así como el viejo keynesianismo no pudo liberar al capitalismo de sus
contradicciones inherentes e impedir el desenvolvimiento de las fases
anteriores de la Crisis General del Sistema
Capitalista Mundial, el nuevo keynesianismo, aún de izquierda, con sus
disfrazadas fórmulas liberal-socialdemocráticas, con sus sueños de reformar al
imperialismo y presentándole como aún capaz de dirigir su economía a la
satisfacción de las necesidades de las masas obreras y masas populares -que es
lo que realmente se esconde bajo su palabreja de poner al mando “una política
económica basada en los “valores de uso”- no es más que un reaccionario intento
burgués, vía los revisionistas economistas postmodernos, de engatusar al
proletariado comunista.
Compañero Muñoz Gamarra, le
aconsejamos sinceramente, Usted puede y debe separar tienda de unos tales
economistas subjetivistas. Los que, muy a su pesar y sinceridad revolucionaria,
obstaculizan su desarrollo personal por la senda del marxismo-leninismo).
La Gran Transición
hacia una nueva civilización
Wim Dierckxsens
Introducción Una
propuesta alternativa al neoliberalismo es más estratégica en la medida en que
enfoca la contradicción fundamental en la racionalidad existente. Para orientar
la racionalidad alternativa a largo plazo, se requiere que la contradicción
fundamental se haga visible. Ello se traduce en la incapacidad de desarrollar
las fuerzas productivas bajo las relaciones de producción existentes. En la
racionalidad económica actual, el capitalismo ha llegado al momento histórico
en que es imposible revincular la inversión con la producción en forma
rentable. En otras palabras, bajo la racionalidad económica y las relaciones
sociales de producción existentes, ya no es posible un mayor desarrollo de las
fuerzas productivas. Esta contradicción se torna cada vez más visible en la
actualidad ante el frustrado proceso de solucionarlo.
LEER ARTÍCULO COMPLETO EN EL SIGUIENTE ENLACE:
ENRIQUE MUÑOZ GAMARRA:
ResponderEliminarGracias compañero por sus preocupaciones. En realidad lo que usted hace es contrario a lo que otros grupos que dicen ser marxistas leninistas rimbombantes, han jurado no publicar mis trabajos, creen que con eso me van a silenciar. He sido duro con Rebelión, criticando a Alba Rico. Por supuesto el silenciamiento viene desde allí. Lo hice por la sinceridad de mis análisis. Y que quede bien claro que no estoy escribiendo para que alguien en especial publique mis trabajos. Además aclaro, todos mis análisis no los hago a nombre de ninguna organización comunista sino solo desde mi visión de analista internacionalista. Los lectores que me siguen saben la posición política que me anima y no necesito decir que soy esto o no soy aquello. máxime cuando hay una feroz persecusion política a nivel internacional con grupos especiales de aniquilamiento. soy consciente de todo ello.
Atentamente:
Enrique Muñoz Gamarra
Analista internacional
www.enriquemunozgaamarra.org
Estimado compañero Enrique Muñoz Gamarra le agradezco sus palabras que se ha sentido ofrecerme, a la vez, que toda su comprensión frente a la delicada situación que se nos crea al utilizar las páginas WEB como instrumento en la lucha ideológica de clase en que nos hemos comprometido, tanto Usted como nosotros. Los tiempos dos difíciles y las incomprensiones abundantes. Más agravada por la política "de puertas cerradas" que aplican algunos Centros Políticos internacionales. Política que nos empuja, consciente o inconscientemente, a desenvolver una lucha cainista. Nosotros, dentro de lo posible, seguiremos publicando sus serios y bien fundamentados análisis internacionales. Aunque sigamos recibiendo críticas por abrirle nuestra página. Consideramos que en la diversidad se encuentra la unidad tan urgente. Cuente Usted con nuestro apoyo y solidaridad. Si Usted tiene a bien, me gustaría me escribiese a a mi correo electrónico para así intercambiar algunas opiniones interesantes.
Eliminar