Hoy jueves 4 de agosto, el movimiento estudiantil convocó a dos marchas: una a las 10:30 a.m por parte de los secundarios y una a las 18:30 por parte de los universitarios y el Colegio de Profesores, a ambas el Ministerio del Interior y la Intendencia de Santiago les dijeron que no podrían marchar. Tanto es así que el fascista ministro del interior Rodrigo Hinzpeter dijo ante los medios "que ya no habrían más marchas estudiantiles por la Alameda".Aún ante la negativa dada por el ministro y la Intendencia de Santiago, los estudiantes igualmente llamaron a la marcha y fueron duramente reprimidos por las Fuerzas Especiales de Carabineros (FF.EE) hoy en la mañana, quienes no dudaron en la utilización del carro lanza agua (conocido en Chile como “el guanaco”) y grandes cantidades de gases lacrimógenos, los cuales hay que acotar tienen efectos abortivos. El violentísimo actuar de las FF.EE impidió que los manifestantes por la Educación se agruparan y reagruparan, impidiendo toda aglomeración en Plaza Italia y sus inmediaciones, en un verdadero Estado de Sitio de facto. A pesar de ello los incidentes, que fueron provocados por las FF.EE quienes empezaron el ataque hicieron que los estudiantes tuvieran que escapar produciéndose diversos disturbios en la capital, en donde la imagen dominante eran los carabineros de FF.EE ya sea corriendo ya sea montados en caballos y con grandes nubes blancas del terrible gas lacrimógeno, sin contar el hecho de la cantidad de carabineros de civil infiltrados para causar destrozos y luego imputárselos a los estudiantes.
Según informaciones, había más de 1.300 efectivos de FF.EE desplegados.
Con esto, el gobierno del derechista Sebastián Piñera (quien en la Encuesta CEP obtiene sólo un 26% de aprobación a su gestión y cuyo gobierno ha sido sacudido por una considerable cantidad de casos de corrupción y de medidas impopulares como la venta de las acciones que conserva aún el Estado de las empresas de agua potable y las sanitarias) ha denegado el derecho constitucional no sólo a manifestarse pacíficamente, sino que incluso el derecho constitucional a la libre circulación, ambos derechos políticos básicos en un país que se dice ser “una república democrática”, y es que poco se puede esperar de un gobierno autoritario como el de Sebastián Piñera y su ministro del Interior, el fascista Hinzpeter.
Todo esto se suma al hecho que la “nueva propuesta” hecha el día lunes por el nuevo ministro de educación, Felipe Bulnes, ha resultado ser igual a la propuesta que el gobierno denominó GANE, pero sólo con unos cambios cosméticos, manteniendo casi igual la propuesta anterior rechaza ampliamente por el movimiento estudiantil. A pesar que el movimiento estudiantil entregará una respuesta oficial sobre la “nueva propuesta” que ahora se titula “Políticas y Propuestas de Acción para el desarrollo de la Educación Chilena” el día viernes, es de público conocimiento que la basta mayoría de los centros de estudiantes la han rechazado, comenzando por la FECH (Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile), la FEUSACH (Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago de Chile) y la FEUC (Federación de Estudiantes de la Pontificia Universidad Católica de Chile), entre otras. Y es que la propuesta del gobierno aún no toma la esencia de lo planteado por el movimiento estudiantil, pues con su propuesta el gobierno sigue manteniéndose firme en mantener el modelo de educación de mercado según los presupuestos ideológicos del neoliberalismo al cual adhiere.
Y a pesar que una amplia mayoría de la población, según encuestas un 75% y otras un 80%, apoya al movimiento estudiantil y sus demandas, el gobierno que ha insistido en “dialogar” y ha acusado continuamente a los estudiantes de “ser intransigentes”, ha mostrado que a pesar de todo diálogo con el ministro resulta infructuoso, pues insiste en la mantención del altamente criticado sistema educacional tal como está ahora simplemente haciendo una serie de reformas cosméticas gatopardas donde “cambia para seguir igual”.
Hace más de 2 meses que se inició el movimiento estudiantil y aún el gobierno no ha sido capaz de acoger las demandas del movimiento, las cuales son ampliamente apoyadas por la ciudadanía, demostrando lo que los marxistas ya sabemos: que Chile no es más que una dictadura de la burguesía. Y es que los intereses de la burguesía chilena se extienden al ámbito del altamente rentable negocio que resulta de la educación, en especial, al recibir enormes cantidades de dinero por parte no sólo del Estado, sino de los apoderados de los alumnos. El lucro ha sido ampliamente defendido por el gobierno, como era de esperarse.
Y a pesar que las propuestas del movimiento estudiantil son básicas y que simplemente es imposible de ser calificadas como “utópicas” como ya lo han hecho los líderes de la oficialista Coalición por el Cambio (Derecha), éstas aún son resistidas con fuerza por parte de los capitalistas que se dedican a lucrar con la educación y por parte de los personeros de gobierno, quienes mantienen fuertes relaciones con los capitalistas del sector educación.
Pero a pesar de todo, los universitarios ya han expresado que la marcha de las 18:30 se realizará de todas formas, lo que supone un fuerte revés a la política de amedrentamiento utilizada por el gobierno de los capitalistas, para el cual los derechos políticos sólo importan en la medida en que se mantengan en el poder y se mantenga el statu quo.
¡Ni un paso atrás!
¡Abajo la educación de Mercado!
¡El gobierno fascista dictatorial y su represión no detendrá al movimiento estudiantil!
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