Secretos,
espías y traidores
El
pasado día 21 de mayo ha sido detenido en Roma un agente portugués de los Servicios de
Seguridad de Información (SIS), Frederick Carvalho Gil después de que “supuestamente”
ha entregado documentos clasificados de
la OTAN a un espía ruso de la FSB –la
nueva KGB- recibiendo a cambio un sobre con de diez mil euros. Retenga
Usted, amable lector, la misérrima cantidad pagada por el acto de traición.
El espía ruso, según la información,
tiene por nombre Sergey Poszdniakov Nicolaevich ha viajado desde Moscú a Roma
para cerrar la sucia maniobra del doble agente portugués. Desconociéndose si el
tal Poszdniakov ha sido extraditado o no y hacía dónde (ni el gobierno
socialfascista portugués ha solicitado su entrega).
El mísero salario percibido por
el submarino prorruso portugués, la actitud no clara del Gobierno de dicho país
y el que el Director del SIS no haya sido removido por el escándalo estallado,
hace pensar en una vulgar provocación antiPutin, montada por la Unión Europea y
por la CIA para remojar las barbas a la OTAN por lo de Ucrania y Siria. De ahí,
¿”libre” iniciativa de un lumpenproletario o un clásico montaje tipo holywoodense de James
Bond?
Por lo pronto, el agente traidor
se encuentra bajo arresto en Lisboa. El otro, como queda dicho, ni se sabe.
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